Incendios y seguro del hogar

incendios y el seguro del hogar

El fuego y las llamas son una de las principales amenazas para nuestras casas. Hay una relación clara entre incendios y seguro del hogar, ya que cada año se producen una enorme cantidad de ellos, requiriendo de la intervención de las compañías aseguradoras para subsanar todos los daños causados.

Solo durante el año pasado, el fuego causó daños por un valor de 422 millones de euros en inmuebles asegurados. La reparación media de un incendio asciende a 1.800 euros. Estas son algunas de las principales estadísticas que esta clase de incidentes deja anualmente en nuestro país.

La garantía de incendios es, sin lugar a dudas, una de las más habituales, independientemente que estemos hablando del hogar o del entorno profesional. No en vano, se trata de uno de los accidentes también más comunes desde hace muchísimos años, se podría decir que hasta siglos. El fuego siempre ha sido un gran invento para el hombre, pero también un “enemigo” al que temer y tratar de controlar.

Aunque a día de hoy no se tenga el mismo miedo a los incendios, lo cierto es que es importante no perderle el respeto, sobre todo cuando hablamos de bienes asegurados como nuestro hogar. ¿Sabías que el fuego causa daños por valor de 1,5 millones de euros diarios? Una cifra espectacular que nos invita a no perder de vista a este elemento, sobre todo en la protección de nuestras casas.

 

Incendios y seguro del hogar: ¿Dónde se producen más incidentes?

Según las estadísticas que manejan las aseguradoras, el 71% de los incendios en bienes asegurados tienen lugar en viviendas. Tras ellas, fábricas y locales, zonas comunes en comunidades de propietarios y comercios.

Geográficamente hablando, los números sitúan a Madrid como la ciudad con mayor número de casos, con un incendio declarado cada 49 minutos. Tras ella, Bilbao padece uno cada hora y Valencia y Barcelona, cada hora y media.

En el tema de los incendios y el seguro del hogar, la prevención es una de las principales armas que tenemos para minimizar los riesgos o evitar su aparición. Disponer en nuestra casa de extintores parece una decisión de sentido común. Del mismo modo, hoy en día existe una buena cantidad de sensores y alarmas contra incendios que nos pueden permitir una rápida respuesta en caso de declararse uno.