Seguro que te lo has preguntado alguna que otra vez: ¿Me atenderá el seguro de salud en dolencias graves? Es una duda razonable en muchos asegurados. Desde Mastery nos gustaría aprovechar estas líneas de nuestro blog para explicaros de manera precisa este tema, ya que hay demasiadas falsas creencias actualmente.
Estamos totalmente seguros que alguna vez has escuchado eso de que las pólizas privadas se encargan únicamente de aspectos poco importantes, enfermedades “fáciles”, como una gripe, o inconvenientes no demasiado complicados, como un esguince de tobillo.
La realidad, como ocurre casi siempre, es caprichosa y se encarga de desmentir esa afirmación. Es obvio que, si tienes gripe y cuentas con una póliza de este tipo, puedes acudir a tu especialista para que te trate de forma profesional. Pero tienes que saber que el seguro de salud se ocupa de dolencias graves de todos sus clientes.
Son varios los argumentos que apoyan esta afirmación que acabamos de realizar. En primer lugar, el equipamiento con el que cuentan los centros privados. Si solo se ocuparan de aquellas dolencias consideradas como leves, no necesitaría contar con equipos de última generación y tecnología.
Tienes que saber que según afirma el Catálogo Nacional de Hospitales, una estadística oficial que describe cada centro hospitalario de España, un tercio de los equipamientos sanitarios para enfermedades graves están instalados en hospitales privados. Entre ellos, destacar algunos equipos para enfermedades tan graves, como el cáncer.
Si con este argumento no te es suficiente para comprobar que estarás cubierto por tu seguro de salud en dolencias graves, vamos a ofrecerte algunos datos oficiales de aseguradoras. Los clientes sanos y leves (aquellos que generan menos de 500 euros de gasto anual en pruebas y servicios) son solo el 21%, mientras que los clientes graves (entre 500 y 6.000 euros) son casi el 50% y los muy graves (más de 6.000 euros anuales), el 27%.
Por todo ello, tenemos que desterrar esa idea de que en un seguro médico las dolencias graves no están cubiertas. Todo lo contrario. Tu póliza privada estará a tu lado para acompañarte en todo momento, tanto en un tratamiento como en la prevención o mitigación de toda clase de patologías.