Desde Mastery, nos gustaría acercarte las principales claves sobre la retribución flexible. Se trata de un sistema realmente interesante en el que los empleados salen beneficiados sin que ello suponga un mayor coste salarial para la compañía. Se ha puesto en franca moda en los últimos tiempos. Procedemos a explicártelo de una manera que lo comprendas en su totalidad.
En nuestra empresa, gracias a las nuevas tecnologías y el apoyo de empresas de servicios como AXA, apostamos por acercaros este sistema. De hecho, en la actualidad, podemos decir que hasta las pymes de pocos empleados pueden iniciar un sistema de Retribución Flexible.
Lo primero que debes tener claro es en qué consiste, ¿verdad? Se trata básicamente de que la empresa ponga a disposición de sus empleados la posibilidad de cobrar parte de su salario en especies (productos y servicios). De esta forma, el trabajador ganará más con el mismo sueldo, adaptando su retribución a las hipotéticas necesidades personales o familiares que le vayan surgiendo en cada momento de su vida. Esto es de forma totalmente voluntaria. Algunos de los productos o servicios que se pueden incluir en el salario flexible son:
- Guardería
- Ticket Restaurante
- Tarjeta de transporte
- Seguro médico
- Seguro de ahorro-jubilación
- Estudios
Atento a estas claves sobre la retribución flexible
- ¿Es lo mismo retribución en especie que retribución flexible? Aunque se parecen, la respuesta es no. La remuneración que una empresa ofrece a sus empleados por el trabajo puede ser en dinero o en especie. Así, esta última opción se define en el BOE como las rentas para “la utilización, consumo u obtención, para fines particulares, de bienes, derechos o servicios de forma gratuita o por precio inferior al normal de mercado, aun cuando no supongan un gasto real para quien las conceda”. Por tanto, la retribución flexible es un tipo de retribución en especie en el que es el empleado el que destina parte de su salario al pago de ciertos productos, beneficiándose posteriormente de exenciones de impuestos.
- Condiciones para que sea considerada retribución flexible. Son varias las características que se han de cumplir:
- La cifra anual destinada no puede superar el 30% de la retribución anual.
- No debe existir entrega de dinero en metálico.
- La base de cotización de la nómina no variará para el trabajador. El IRPF sí que cambiará, reduciéndose.
- No debe suponer un gasto para la empresa.
- Este servicio ha de ser totalmente voluntario para el trabajador. En ningún caso supondrá un coste para él
- Ha de darse una novación del contrato de trabajo que ya existía entre ambas partes.
- Una de las claves sobre la retribución flexible es que ha de suponer un ahorro a corto y a largo plazo para el empleado. Por un lado, le permite reducir sus gastos habituales, como pueden ser la comida o las aportaciones a los planes de pensiones. Por otro lado, el descenso en la retención del IRPF también le beneficia a largo plazo.
- Del mismo modo, desde el punto de vista de la empresa, es una forma de mejorar el salario de sus empleados sin coste salarial, mejorando el employer branding, el bienestar de sus trabajadores y mejorando la competitividad salarial.
